Golpe de 1976
El 24 de marzo de 1976 tuvo lugar el golpe de estado cívico-militar que derrocó a la presidenta María Estela Martínez de Perón, dando inicio al gobierno de facto autoproclamado como Proceso de Reorganización Nacional.
Durante los 7 años siguientes, la última dictadura implementó un plan económico de corte neoliberal que implicó un crecimiento exponencial del endeudamiento público el cual se quintuplicaría, llegando a aproximadamente u$s 46.000 millones a fines de 1983. Para tal fin, las Fuerzas Armadas impusieron la represión ilegal, articulando un sistema de terrorismo de estado que implicó la desaparición de 30.000 personas y el exilio de dirigentes políticos, intelectuales y científicos.
Golpe de 1962
El 29 de marzo de 1962 había tenido lugar otro golpe cívico-militar. Después de ser derrocado Arturo Frondizi (Unión Cívica Radical Intransigente) y habiendo ya renunciado previamente el vicepresidente Alejandro Gómez, asumió la primera magistratura el presidente provisional del Senado, José María Guido (UCRI).
Si bien, Guido era el tercero en la línea de sucesión presidencial según lo estipulado por la Ley de Acefalía y contaba con el apoyo del presidente depuesto, su gobierno se considera de facto. Juró ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación y su principal misión fue organizar las elecciones de julio de 1963 en las cuales resultó electo Arturo Illia (Unión Cívica Radical del Pueblo). En dichos comicios continuó la proscripción del peronismo, establecida a partir de septiembre de 1955.
Asimismo, tuvo lugar un enfrentamiento armado entre dos facciones del Ejército, azules y colorados, las cuales se diferenciaban por el distinto énfasis en políticas prescriptivas del peronismo.
Ambos gobiernos de facto (1962-63 y 1976-83) compartieron un ministro de economía, José Alfredo Martínez de Hoz, hombre fuertemente ligado a las patronales agropecuarias y empresarias, que se convertiría en un símbolo del establishment argentino. La figura de Martínez de Hoz ilustra la participación de los sectores dominantes en los golpes de estado de la segunda mitad del siglo XX, estableciendo una visión elitista y excluyente, contraria a las mayorías populares.
Nacimiento de Juan Manuel de Rosas (30 de marzo de 1793) y fallecimiento (14 de marzo de 1877)
El 30 de marzo de 1793 nace el brigadier general Juan Manuel de Rosas, quien Durante la primera mitad del siglo XIX ejerció el cargo de gobernador de la provincia de Buenos Aires. Su poder político comprendió dos periodos: entre 1829 y 1832, y entre 1835 y su renuncia a raíz de la derrota en la batalla de Caseros, el 3 de febrero de 1852.
Su política económica se caracterizó por ser conservadora: controlando gastos, manteniendo un equilibrio fiscal, sin emisiones de moneda ni endeudamiento. Durante la etapa rosista, la suma de las diversas renegociaciones de préstamos y el superávit comercial provocan una sustancial quita en los intereses, disminuyendo el monto total de la deuda en una quinta parte.
Una de las políticas económicas más rememoradas de Gobernador Rosas fue la sanción de la Ley de Aduanas, una medida proteccionista que buscaba impulsar la producción y el mercado interno, mejorando la balanza comercial. Dicha ley controlaba la importación de algunos productos y establecía aranceles para otros casos.
Juan Manuel de Rosas fallece el 14 de marzo de 1877 en el exilio.
Muerte de Marcelo T. Alvear (23 de marzo de 1945)
Un 23 de marzo de 1945 falleció a los 73 años Marcelo Torcuato de Alvear. Alvear fue el segundo presidente bajo la ley Sáenz Peña, la cual había consagrado el voto secreto y obligatorio en 1912. Bajo su administración se incrementó el endeudamiento externo después de la reducción que produjo su predecesor, Hipólito Yrigoyen. Al finalizar su mandato comprendido entre 1922 y 1928, la deuda se había incrementado en aproximadamente 42 millones de libras esterlinas, ascendiendo así de £101 millones a £143 millones