Fue un final de semana muy movido para el Museo de la Deuda Externa. Aparte de la visita realizada por alumnos del Programa Amartya Sen provenientes de tres universidades del interior (ver nota aparte), se realizó una actividad con alumnos de quinto año del Colegio San Francisco Javier, del barrio porteño de Palermo. Debido a la gran cantidad de alumnos, la charla se realizó en un aula del edificio anexo de la Facultad de Ciencias Económicas.
Previo al inicio de la actividad se comentó a los chicos el marco institucional en el que se encuentra el Museo y se refrescaron conceptos económicos que serían mencionados a continuación. Luego, se proyectó el documental Historia de un engaño, que recorre la historia del endeudamiento público argentino desde el primer empréstito otorgado al país en 1824 hasta la cancelación de la deuda con el FMI en 2006.
Para hacer la charla más dinámica y poder abarcar mejor los temas, se realizó una pausa al finalizar el fragmento de la última dictadura cívico-militar, en 1983. Allí se abordaron dos conceptos: “bicicleta financiera” y «estatización de la deuda privada», operatorias que se llevaron a cabo en el período mencionado. Además, en base el comentario de uno de los presentes, se explicó la investigación llevada a cabo por el periodista tucumano Alejandro Olmos, que concluyó con la sentencia del juez Ballestero en el año 2000 declarando el carácter fraudulento e ilegítimo de la deuda.
Respecto al período que comprende del gobierno de Raúl Alfonsin hasta el mandato de Néstor Kirchner se detalló el Plan Brady llevado a cabo en 1992 y la primera reestructuración de la deuda en 2005. Posteriormente se abarcó el segundo canje de deuda realizado en 2010 y el rol de los llamados fondos buitres, algo que despertó particular interés en los alumnos.
La actividad contó con debates interesantes y con preguntas que sirvieron a modo de disparador para abarcar otros temas que no están relacionados estrictamente con la deuda externa.
Al finalizar, los alumnos recorrieron el salón de exposiciones y se llevaron las nuevas historietas dobles, elaboradas por el equipo del Museo. También se le otorgó al colegio un juego de mesa didáctico y un compilado con las 4 historietas, lo que generó entusiasmo en los alumnos.