Un día como hoy, pero de 1956, Argentina ingresó al Fondo Monetario Internacional por iniciativa del presidente de facto Pedro Eugenio Aramburu. A través del decreto–ley Nº 7103, Aramburu dispuso que se iniciaran los trámites necesarios para ingresar a dicho organismo y al Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento por recomendación del entonces asesor del gobierno, Raúl Prebisch
El FMI había sido creado en julio de 1944 en una conferencia de las Naciones Unidas celebrada en Bretton Woods, Nuevo Hampshire (EEUU). El propósito original de dicho organismo era asegurar la estabilidad del sistema monetario internacional, brindando asistencia técnica y financiera a los países que lo necesitasen.
Argentina se había negado a ingresar al mismo durante la administración peronista. No obstante, el golpe de estado de 1955 que depuso a Juan Domingo Perón revirtió la política sostenida hasta ese momento. Al concluir el gobierno de Aramburu, la deuda externa había alcanzado los 1051 millones de dólares. La sumisión a los distintos dictados del FMI finalizaron recién casi 50 años después, cuando en 2005 se cancelaron todos las deudas con el mismo.