El 29 de junio se cumplirán doscientos años del inicio de sesiones del Congreso de los Pueblos Libres. El mismo constituyó el primer ámbito político de declaración de Independencia en el Río de la Plata, habiendo sido sistemáticamente ocultado por la historiografía oficial.

Las Provincias que respondían al Protectorado de José Gervasio de Artigas enviaron representantes a la Villa del Arroyo de la China, también conocida como Concepción del Uruguay, por entonces capital de la Provincia de Entre Ríos, a fin de llevar a cabo los objetivos truncos de la Asamblea del Año XIII. Se trataba de declarar la independencia de la dominación del Reino de España y de toda potencia extranjera, estableciendo las bases para la construcción de un Estado federal en el cono sur.

Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes, Misiones, Córdoba y la Banda Oriental enviaron sus diputados a la convocatoria de Artigas, dando legitimidad al Congreso. Fue declarada la Independencia y se legisló sobre cuestiones como el comercio interior, las relaciones exteriores, el establecimiento del voto universal y la cesión de  propiedad de la tierra para las masas de campesinos desposeídos, inaugurando la primer reforma agraria del siglo XIX en Iberoamérica. Artigas llamaba a privilegiar a los más infelices, es decir, los criollos pobres, esclavos libertos y pueblos originarios, quienes sufrían la explotación en manos de los grandes hacendados.

El Congreso contó con la abierta oposición de la burguesía comercial anglo-porteña y las coronas portuguesa y británica. Desde los poderes fácticos de la época se combatió la implementación de las ideas vertidas en el Congreso, para décadas más tarde, ignorarlo como suceso histórico, silenciando los debates generados en dicho ámbito.

Cuando trece meses después, se reunía el Congreso de Tucumán, en julio de 1816, Artigas le recordaba en una carta al por entonces Director Supremo Juan Martín de Pueyrredón que las Provincias asistentes al Congreso de los Pueblos Libres ya habían declarado la Independencia, más de un año antes. Por ello, salvo Córdoba, ninguna de esas provincias concurrió al Congreso de Tucumán por considerarlo innecesario.

Desde el Museo de la Deuda Externa Argentina, creemos que es tiempo de rememorar lo sucedido en junio de 1815 y darle la importancia que se merece, aspirando a contribuir con la construcción de la memoria histórica de los Pueblos de nuestra América.